Sobre la paciencia...
¿Cuántas veces pasamos esperando que las cosas sucedan? Incluso en ocasiones nos olvidamos del presente pensando en aquello que deseamos a futuro, si te encuentras cercano a Dios sabes que hay promesas para tu vida y si no, pues de igual manera confías en el destino o en el futuro y suele ser desesperante ver cómo pasa la vida pero en ninguna manera se acerca a lo prometido o destinado, ese fue mi caso, esa noche le preguntaba en que momento mis ojos verían lo que Él con tanto amor me prometía, le contaba de mi sentir, de cómo soñaba con situaciones que tal vez no serian de tal forma e incluso dudando que algún día pasaran, como siempre Él tenia una respuesta para todo, sus palabras tan coherentes y llenas de esperanza fueron para mi la paz que necesitaba, me enseño sobre la paciencia ampliando en gran manera mi concepto:
-La paciencia es una virtud que viene del cielo, es indispensable para el cumplimiento de las promesas, muchas promesas, muchos propósitos se han roto porque la gente no ha sabido esperar, aún yo cuando estuve en la tierra tuve que tener paciencia, porque tomó tiempo que se cumpliera el propósito, mi ministerio no empezó si no a los treinta años aunque desde los doce yo ya sabía sobre las escrituras, pero saber escritura y entender el propósito de ésta no es lo mismo, yo deseaba hablar de mi padre, deseaba que todos conocieran de Él, pero tuve que esperar porque el propósito requería paciencia, la paciencia requiere carácter, requiere dominio para saber controlarse en tiempos de desesperación, de la paciencia viene la fe, no hay fe sin paciencia, anhelan recibir tantas cosas en tan poco tiempo y no se dan cuenta que también para recibir se capacita, que las riquezas, el honor y la sabiduría se adquieren con paciencia y cuando por fin entiendas eso, vendrán las cosas y las disfrutarás sabiendo que con ellas recibiste la más grande de las virtudes, la paciencia es una virtud en la que yo me deleitó, me honrará saber que esperan disfrutando tan solo lo que tienen, se olvidan del presente deseando tanto promesas futuras, su tiempo no es mi tiempo, no entienden que lo que para ustedes son años para mí son segundos y no cambiaré mi tiempo para que confíen en mi, necesitan ustedes confiar en mi tiempo y entonces llegará lo que esperan, sé sabia para esperar con diligencia, sé sabia para obtener del cielo lo que te hace falta, busca el reino, busca los misterios que el guarda y entenderás lo que la paciencia trae consigo.
¿Cuánto tarda una promesa? A David le llevo años ser rey, a Abraham millones para que se cumpliera su promesa ¿y sabes por qué? Porque para recibir una promesa se preparan corazones, cuando alguien no está listo para recibirla puede destruir en segundo lo que tardo años en formarse, aún hay cosas que cambiar, aún hay procesos que pasar y pasos por cumplir y ¿porque dudas que puedan pasar las cosas como se forman en tu mente? ¿porque te parecen imposibles? ¿acaso no parecía imposible que el mar se abriera y pasaran en seco? ¿acaso no es imposible que de una peña en el desierto brote agua? ¿acaso no suena imposible que del cielo caiga maná que alimente a multitudes? ¿acaso no hice que unos cuervos llevarán de comer a un hombre? ¿porque crees que lo que hay en tu mente es imposible de existir? y aún si no lo hubiera, ¿acaso no soy capaz de crear hombres del polvo de la tierra? ¿acaso no soy capaz de soplar aliento de vida para el hombre exista? ¿porque crees que eres tú la que crea sus deseos? si todo lo que hay en ti yo lo sé, yo lo forme, te he mostrado cosas grandes por hacer y tu solo piensas en lo pequeño que puedes recibir, no has creído en el Dios de imposibles, porque sus mentes limitadas no creen que haya Dios así, pero heme aquí Soy el que Soy, el que dio vista a los ciegos que creyeron que jamás verían, el que detuvo demonios cuando nadie pudo hacerlo, el que detuvo un flujo de sangre de años completos, ese soy, ¿porque no creen que lo imposible puede darse si tan solo ven posible al Dios que les he mostrado? no mires lo que el hombre puede hacer porque el hombre equiparado con Dios y lo que yo soy, son insectos pequeños comparados con la grandeza del reino de los cielos, no añores lo que hay en la tierra, porque eso se destruye, más las promesas del cielo son eternas, tan eternas que llevan tiempo cumplirse, porque valen tanto, que dan testimonio de mi…
Como siempre no tuve mucho más que decir, llorar y expresar mi gratitud fue lo único que tuve para darle, esforzarme por comprender tanta sabiduría y hacer vivas en esas palabras fue mi propósito, confiar en la espera mi esperanza y mirarlo como el Dios que me mostraba mi fe para ver posible lo imposible…
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